Descripción
Se observa a San Juan de Dios en primer plano, de pie y observando directamente al espectador. Viste su característico hábito pardo, va descalzo y en la mano izquierda porta una granada, uno de sus atributos más característicos. En la mano izquierda lleva un crucifijo. Sobre la mesa cubierta por una tela roja se observa un flagelo y una calavera, símbolo de la penitencia. Del lado derecho de la composición se observa, en segundo plano, nuevamente al santo cargando sobre su espalda a un enfermo, su representación más difundida. En tercer plano un paisaje que enmarca ambas escenas.